La tipografía es una de las disciplinas más importantes en diseño gráfico, y es que cómo se disponen los caracteres en una página o pantalla puede hacer una gran diferencia en cómo se percibe la información. La tipografía ornamental se refiere a aquellas fuentes que presentan elementos decorativos, caligráficos, o con detalles añadidos que las hacen más atractivas visualmente. Si bien la utilización de tipografía ornamental es una elección estética, es importante considerar cómo el tamaño y espacio son elementos críticos para obtener el mejor resultado.
Cuando se trata de tamaño de letra, la elección de una tipografía ornamental puede llevar a algunos desafíos. Por un lado, los detalles adicionales pueden hacer que la letra parezca más pequeña de lo que realmente es- especialmente cuando se trata de detalles que se extienden más allá del área de la letra en sí. Por otro lado, si se opta por una fuente demasiado grande, los detalles ornamental pueden parecer abrumadores y distraer de la información del texto.
La clave para encontrar el tamaño correcto para la tipografía ornamental es encontrar el equilibrio que permita que los detalles se muestren de manera clara sin inundar el ojo del lector. Un buen punto de partida es elegir un tamaño de fuente que sea legible para el cuerpo principal del texto y a partir de allí ajustar el tamaño de la tipografía ornamental para adaptarlo, también teniendo en cuenta aspectos como el espacio disponible y la cantidad de texto que se desea incluir. Es importante recordar que el objetivo no es solo hacer que el texto sea visualmente atractivo, sino también legible y usable.
Aunque el tamaño de la tipografía ornamental puede ser crítico para su uso, el espacio que rodea a la letra también puede ser igualmente importante. El espacio negativo ofrece un marco en el que se puede colocar el texto y los elementos decorativos, lo que ayuda a que los caracteres se destaquen mejor. A su vez, el espacio negativo también ayuda a garantizar que la legibilidad no se vea comprometida, especialmente en caracteres que presentan detalles agregados que pueden dificultar su lectura.
Cuando se trabaja con tipografía ornamental, considerar la distribución de espacio es fundamental. La letra ornamental puede tener picos, rizos, curvas, entre otros, y puede ser necesario ajustar el espacio entre ellas para evitar que se amontonen y se hagan ilegibles. En algunos casos, puede ser necesario ajustar el espacio entre todas las letras para asegurarse de que los elementos decorativos no abrumen la legibilidad.
En tipografía, el kerning y el tracking se refieren a los espacios entre las letras y las palabras. Estos elementos pueden marcar una gran diferencia en la legibilidad de la letra ornamental. Si bien el objetivo es, por lo general, evitar que las letras choquen, en tipografía ornamental, la separación entre los detalles decorativos y las letras también es importante.
El kerning implica ajustar el espacio entre dos letras individuales, mientras que el tracking se refiere al espacio entre todas las letras en una palabra en su conjunto. La elección de un espacio adecuado en ambas dimensiones ayuda a garantizar que los detalles decorativos no distraigan del texto y que se mantenga una estética atractiva.
La tipografía ornamental puede ser una gran adición a cualquier diseño, pero es importante elegirla de manera consciente y considerar tanto el tamaño como el espacio que la rodea. Un equilibrio adecuado entre ornamento y legibilidad es esencial para lograr una fuente legible y estéticamente atractiva. Al considerar el espaciado de su tipografía ornamental, presta atención a las dimensiones de la fuente y busca la manera de trabajar en armonía con la legibilidad de la fuente. De esta manera, al utilizar la tipografía ornamental, se podrá lograr un diseño llamativo y fácil de leer.